La crisis de la República. Augusto y la organización del Imperio

Crisis institucional

A pesar de que las instituciones republicanas han vivido una constante evolución, tanto por lo que hace a la gestión de la expansión como a los conflictos sociales, son incapaces de seguir aguantando. A nivel económico y social:

  • Nos encontramos con que en el s. II a. C el populus está sumido en la miseria. La expansión sólo da beneficio a la élite. Ésta intenta siempre que el populus no salga beneficiado, y que, si lo hace, sea lo más mínimamente posible. Ello llevará a una constante proletización. La constante guerra exigía una constante movilización del ciudadano romano. El ciudadano romano por excelencia es el pequeño terrateniente, y la movilización hace que se descuiden sus pequeñas parcelas, provocando la crisis del soldado-ciudadano.
  • Corrupción constante a pesar de las instituciones. Las élites acapararán el ager publicus. Sigue sin haber repartos justos a pesar de haber sido una de las dos peticiones básicas de los plebeyos. Además, aprovecharán que el ciudadano está luchando en el frente para hacerse con sus tierras. Encontrándonos así con una contradicción en el sistema, y la crisis de la clase media.

El núcleo de la expansión romana es, sin duda, ese ciudadano propietario. Ello conlleva que no se trate de una simple crisis, porque peligra el sistema de reclutamiento. La insostenible situación llevará a estallidos de violencia, reflejándose una válvula de escapa, una reacción ante las injusticias, ante el sentimiento de impotencia. Se planteará, a partir de todo ello, una fuerte controversia.
Un sector de la NOBILITAS, viendo como el núcleo militar estaba en peligro, busca cambiar la situación. Y de ahí surgirán dos proyectos de reforma agraria, bajo la conducción de los hermanos Graco, en 133 y 121. Ambas reformas, a rasgos muy generales, buscan mejorar la situación y repartir la tierra de manera más justa. Será precisamente a partir de estos hermanos Graco cuando aparezca una gran división de la élite.

  • Optimates: la facción conservadora y que intenta seguir con el sistema. No querrá dar ningún beneficio al populus.
  • Populares: la facción que busca el cambio, y que sostienen que los territorios provinciales que están en manos de los peregrinos, o extranjeros, pasen a estar bajo la jurisprudencia del populus. Es necesario parar la acaparación del ager publicus y comenzar a dar beneficios de la expansión al populus. Por ello, se decide que la mejor forma es expulsar a los peregrinos, que no son ciudadanos romanos y a quienes se les puede expoliar sus tierras.

La historia terminará trágicamente. Los conservadores eliminarán a sus contrincantes y los hermanos Graco serán asesinados. Se violará la figura del tribuno de la plebe ya que uno de los hermanos lo era. En detalles así podemos observar la crisis de las instituciones. ¿Cómo es posible que se llegue a un nivel tal?
El núcleo ideológico del imperialismo romano es el DESARROLLO DESIGUAL. Existe un CENTRO que se beneficia de la PERIFERIA, explotándolo sistemáticamente. El centro se cuidará para que no exista equiparación. Básicamente, la NOBILITAS huirá de crear estados políticos fuera, y también de dar la ciudadana romana ya que ello comporta que se rompa la dinámica base. Pero será la misma NOBILITAS la que contradiga el sistema. Ya que va a comenzar a exportar el sistema de producción utilizado en el CENTRO a las regiones provinciales, a la PERIFERIA. Para rentabilizar la periferia se exportarán métodos más rentables de producción, lo que romperá con el desarrollo desigual y con la lógica base del imperialismo y de la república oligárquica. Veremos cómo a nivel económico no se evita equiparación y sí se evita a nivel político.
El fracaso de las reformas agrarias nos llevará al año 107, en el que tendrá lugar una reforma militar. El artífice de ésta será CAYO MARIO, un hombre nuevo (aquellos que cohesionan más la nobilitas), el cual será elegido seis veces consecutivas cónsul. Al observar el panorama y aceptar que es imposible recuperar al soldado-propietario, se empezará a caminar hacia el soldado profesional. Éste tendrá un sueldo que ayude a su subsistencia. El pueblo más bajo (ya que la clase media entró en crisis), los proletariados, por fin jugarán un papel importante siendo ahora el CENTRO DEL NÚCLEO MILITAR. La reforma militar de Mario comportará una válvula de escapa a nivel social. Los proletarios tendrán medios de subsistencia. Era necesario poner en práctica alguna estrategia para continuar con la expansión, para continuar con la fuerza militar que es la base de ésta. Ahora se pagará un auténtico STIPENDIUM, y no sólo simbólico.

Conflicto con los aliados itálicos, los SOCII

Nos encontramos con que en el siglo II a. C. existen buenas relaciones con los socii. Cada vez están consiguiendo más importancia militar. Además de ello, pagan el TRIBUTUM, el impuesto clásico, orientado al mantenimiento del ejército. En el año 167 será derrotada Macedonia y Roma conseguirá unos beneficios sorprendentes. Así es, que se eliminará el tributum a los ciudadanos romanos pero NO a los Socii ya que no son ciudadanos romanos. Las reivindicaciones empezarán por esa línea, querrán ser ciudadanos romanos. Pero la visión retrógrada romana no acepta integrar elementos provinciales. La situación estallará en el 91 a. C. con una guerra que durará hasta el 88. La presión de los socii dará frutos y Roma cederá. Se otorgará la ciudadanía romana con la LEX IULIA DE CIVITATE. Todos los socii itálicos serán ciudadanos romanos. Se calcula que hacia mediados del s. I a. C. tres cuartas partes del ejército eran Socii de ahí que acabase cediendo.

Evolución tardorrepublicana

Hemos visto cómo empezará a haber un combate entre facciones en el seno de la élite de la nobilitas. El término popular es despectivo, que significaría algo así como demagogo, manipulador, mientras que optimate significaría los excelentes, reflejo de quién pone los términos.
La dualidad sumirá a Roma en una fuerte inestabilidad política, y habrán líderes de cada facción que intentarán imponerse. Éstos serán personajes con un fuerte prestigio. Además, son generales y por tanto tienen tropas a disposición. En resumidas cuentas, las figuras que sobresaldrán tienen una fuerte riqueza, importantes clientelas, mucha dignitas y ejército. La reforma de Mario dará lugar paulatinamente a crear una especie de ejército privado. Los ejércitos profesionales estarán al servicio del general que es la figura de referencia, quien les paga. Estos líderes serán Cayo Mario y posteriormente Sila, mostrándose así una alternancia entre populares y optimates. Sila será capaz de vencer militarmente a Cayo Mario lo que le dará más dignitas tras la victoria. Será dictador desde el 82 al 79, año en el que renunciará. El motivo es controvertido pero se cree que pudo ser por un problema de salud. Pero Sila dejará las cosas bien atadas y pondrá como sucesor a Pompeyo Magno, otro optimate, en el gobierno desde el 75 hasta el 50. Es un personaje hábil políticamente. El senado aprobará todo un seguido de leyes que le otorgará un poder absoluto. Y ello, en parte, gracias a la victoria sobre Mitríades que le otorgará el dignitas suficiente. Además luchará contra la piratería, la cual era bien vista pero que ahora llega a un punto que interfieren y es necesario acabar con ellos. Pompeyo, no obstante, no se atreverá a ir en contra del Senado y formará el primer triunvirato, que no es más que un pacto entre otros líderes de la Nobilitas (Craso y Julio César). Craso será derrotado y se pasaría a un conflicto civil entre Pompeyo (optimate) y Julio César (popular). La guerra terminará con la victoria de César, derrotando de esta manera a la facción de los optimate. Rápidamente se erigirá como dictador, creando reformas importantísimas que necesitarán de la colaboración de todos los pueblos romanos. Es un momento en que la desigualdad entre provincias es inútil. César, no obstante, calculará mal y la oposición senatorial se hará cada vez más importante. En este marco debemos situar el asesinato de César. Dejará un delfín, Octavio, que creará dentro de los marcos de la legalidad (y no como un pacto) el segundo triunvirato. Acabará imponiéndose a los dos triunviros y se erigirá como un líder único, Augusto.